sobre el autor
datos del libro
índice
fe de erratas
notas de prensa
obras del autor
obras relacionadas


Buscar en este libro


Ernst Mayr

Por qué es única la biología

Consideraciones sobre la autonomía de una disciplina científica


notas de prensa

Ernst Mayr, Por qué es única la biología. Consideraciones sobre la autonomía de una disciplina científica.
ArtefaCToS - España, 11/1/2008

Pasión por la biología
Revista de Libros - España, 5/1/2007

Elogio de Darwin
El País - Babelia - España, 1/20/2007

Elogio de Darwin
El País - España, 1/20/2007

Por qué es única la biología
EXACTAmente - Argentina, 9/1/2006

Yo admiro a... Ernst Mayr
Perfil - Argentina, 8/27/2006

Legado de un maestro
La Nación - Argentina, 8/27/2006

Grandioso Mayr
La Vanguardia - España, 6/7/2006

¿Por qué es única la biología?
Revista Digital de Ciencias UB - Argentina, 3/1/2006

título de la nota: Ernst Mayr, Por qué es única la biología. Consideraciones sobre la autonomía de una disciplina científica.
autor de la nota: Andrés L. Jaume
medio: ArtefaCToS - España
fecha: 11/1/2008

extracto
A lo largo del libro, Mayr repasa los puntos de vista que ha ido elaborando durante su vida sobre la biología y la evolución.
***
En suma, el libro es la última palabra de Mayr sobre los temas que a lo largo de su carrera académica fueron objeto de investigación y preocupación, constituye un recorrido de la mano de uno de los autores más relevantes en su campo por las diferentes ideas de buena parte de la biología evolutiva del siglo XX y testimonia la visión de un científico acerca de su propia disciplina.

título de la nota: Pasión por la biología
autor de la nota: Andrés Moya
medio: Revista de Libros - España
fecha: 5/1/2007

extracto
El título de la obra, que consta de una introducción y doce capítulos, refleja la conocida tesis del autor sobre el carácter único -llamémoslo unicidad- de la biología.
***
No deja títere con cabeza y no le importa reconocer que hay conceptos sobre los que otros han reflexionado sobre una base de profundo desconocimiento, pero también que él mismo no ha llegado a poder resolver o clarificar, en su sistema de pensamiento, algunas cuestiones. Este tipo de actitud es propia de quien no tiene otra pasión que la del puro ejercicio de la actividad intelectual honesta.
***
Pues bien, siendo científica, sostiene Mayr, la biología tiene carácter histórico [...], y ahí radica su carácter único.

título de la nota: Elogio de Darwin
autor de la nota: José Manuel Sánchez Ron
medio: El País - Babelia - España
fecha: 1/20/2007

extracto
Especialmente valioso es Por qué es única la biología, del recientemente desaparecido Ernst Mayr (1904-2005), uno de los gigantes de la biología evolucionista. Con la diestra mano del maestro que fue, Mayr presentó aquí una escueta y profunda visión de la biología que tiene que ver con la evolución, una visión en la que filosofía, historia y ciencia se alían con un propósito común: el de comprender mejor.

título de la nota: Elogio de Darwin
autor de la nota: José Manuel Sánchez Ron
medio: El País - España
fecha: 1/20/2007

extracto
Un nuevo Darwin siempre es una buena noticia, más aún en tiempos en que vuelven a surgir debates que uno creía abandonados en el más oscuro y tenebroso baúl de la historia: la polémica creacionismo-evolucionismo, ahora camuflada con el pomposo nombre de "diseño inteligente".
***
Especialmente valioso es Por qué es única la biología, del recientemente desparecido Ernst Mayr (1904-2005), uno de los gigantes de la biología evolucionista. Con la diestra mano del maestro que fue, Mayr presentó aquí una escueta y profunda visión de la biología que tiene que ver con la evolución, una visión en la que filosofía, historia y ciencia se alían en un propósito común: el de comprender mejor.

título de la nota: Por qué es única la biología
autor de la nota: Armando Doria
medio: EXACTAmente - Argentina
fecha: 9/1/2006

extracto
Por qué es única la biología es un texto imprescindible.
***
Determinismo, reduccionismo, leyes y conceptos, Mayr delinea la biología, la refunda, pero también pinta la ciencia entera.
***
La contundencia de sus afirmaciones, la agudeza y la potencia de sus razonamientos hacen difícil de creer que lo escribiera entre los 80 y los 100 años. Un hermoso legado.

título de la nota: Yo admiro a... Ernst Mayr
autor de la nota: Ignacio Soto
medio: Perfil - Argentina
fecha: 8/27/2006

extracto
[Mayr] Junto con el genetista Theodosius Dobzhansky y el paleontólogo Gaylord Simpson, entre otros, fundó las bases de la biología evolutiva moderna, unificando conceptos divulgados por Darwin con conocimientos más recientes sobre genética y herencia.
***
[...] en una época en la que nos bombardean con noticias sobre el "gen de la infelicidad" o el "gen de la criminalidad" me pareció interesante rescatar la desconfianza de Mayr hacia explicaciones simplistas y la idea de que problemas complejos ameritan abordajes multidisciplinarios (y en esto la biología es sólo un ejemplo).

título de la nota: Legado de un maestro
autor de la nota: Ana María Vara
medio: La Nación - Argentina
fecha: 8/27/2006

extracto
Ernest Mayr fue uno de los biólogos más importantes del siglo XX. En cien años de vida, su trabajo compendió el arco que va del naturalista-explorador al museólogo, al teórico, al testigo que reflexiona sobre la historia que ayudó a escribir. En 1926, con apenas 21 años, se doctoró en la Universidad de Berlín con una tesis sobre ornitología. Al año siguiente conoció al banquero y naturalista Walter Rothschild, quien le propuso financiar una expedición a Nueva Guinea para el Museo Americano de Historia Natural. En un mes aprendió malayo y el dialecto neomelanesio, además de disección de aves y manejo de armas, habilidades indispensables para internarse en montañas y selvas en busca de especies exóticas.
Su mayor aporte llegaría en 1942, con la publicación de Sistemática y el origen de las especies, donde haría una contribución fundamental a la síntesis de dos sistemas de ideas hasta entonces separados: la evolución y la genética. Luego trabajó en Harvard, donde fue profesor y director del Museo de Zoología Comparada hasta su retiro en 1975. Aunque su longevidad, por sí misma, no explica su productividad, ciertamente ambas están relacionadas: a lo largo de su carrera describió 26 especies de aves y 38 de orquídeas, y publicó unos 700 trabajos y 25 libros, 14 de ellos después de los 65 años, cifra que incluye títulos fundamentales como El crecimiento del pensamiento biológico, lamentablemente aún no traducido al castellano.
Por qué es única la biología. Consideraciones sobre la autonomía de una disciplina científica es el último libro de Mayr. Publicado en 2004, meses antes de su fallecimiento, representa una obra de síntesis y de legado, que pone en evidencia su larga reflexión sobre esta disciplina, a la vez que algunas de sus preocupaciones, rivalidades y manías. Semejante densidad de expertise, sin embargo, no aleja a los legos de este trabajo. En Por qué es única la biología Mayr se interna en las aguas de la epistemología con singular talento pedagógico. Su argumento central es que la biología debe estudiarse sin compararla con el patrón de la física, modelo de ciencia durante la primera mitad del siglo XX.
Mayr está preocupado por demostrar que la biología es un saber sistemático, no una mera colección de peculiaridades. Parece verse aquí una reacción a su pasado de naturalista, cuando "lo raro" en la forma de especies desconocidas era el centro de su trabajo. Una vez que sienta esas bases, se detiene a analizar por qué la biología es diferente de otras ciencias naturales y cuáles son sus características distintivas. Entre ellas destaca la complejidad de la vida, el carácter histórico de la selección, el papel del azar y la limitación al "mesocosmos" de los fenómenos biológicos: a diferencia de la física, que abarca desde las partículas subatómicas al universo, la biología se mueve fundamentalmente en una escala que va de los virus a los dinosaurios.
En particular, Mayr discute con detalle los enfoques teleológicos (que buscan las causas en los destinos finales) ya que intentos históricos por explicar las peculiaridades de la biología se basaron equivocadamente en este finalismo. Otro gran concepto epistemólogico examinado por Mayr es el reduccionismo, que debate y descarta como inapropiado en esta ciencia.
La segunda mitad del libro está dedicada al darwinismo, la gran macroteoría de la vida. Mayr se detiene a explicar que este sistema comprende, en realidad, cinco teorías, cada una de las cuales enfrentó desafíos específicos para ser probada, difundida y aceptada. La primera teoría es la que propone la idea de la evolución en sí, en contraposición a la invariabilidad de las especies que sugiere, por ejemplo, la Biblia. La segunda tiene que ver con que especies diferentes pueden compartir ancestros. La tercera postula un gradualismo en la evolución, en oposición al saltacionismo, que implica cambios bruscos. La cuarta habla de la multiplicación de las especies, para explicar la enorme diversidad biológica. Finalmente, la quinta teoría propone el mecanismo de selección natural que, como en un juego de cajas chinas, representa nuevamente un paquete de teorías, dado que postula la existencia de un "excedente reproductivo" -que nacen más crías de las que podrán vivir- y el carácter hereditario de las diferencias individuales.
Por fin, Mayr se detiene a discutir si la noción de "revolución científica" de Thomas Kuhn, elaborada en 1962 a partir de la figura de Galileo, es adecuada para reflejar la historia de la biología. Y concluye que no. Como su obsesión por contrastar su ciencia "contra" la física, esta última polémica muestra el posicionamiento generacional de Mayr, quien evidentemente padeció el papel dominante de la física, que se prolongó desde comienzos de siglo hasta la posguerra. Sólo que Kuhn ya pasó de moda, y los grandes proyectos y las consecuentes inversiones y expectativas llegan hoy de la mano de la biología y no de la física.
En los tres capítulos finales, Mayr vuelve a qué es una especie, a la evolución humana y a la discusión sobre la vida extraterrestre. En brevísimas páginas logra desarrollos acabados y claros, y se muestra interesado por fijar su posición. Ciertamente, en un sentido que trasciende la metáfora, Por qué es única la biología representa la última palabra de Mayr. La palabra de un maestro.

título de la nota: Grandioso Mayr
autor de la nota: Martí Domínguez
medio: La Vanguardia - España
fecha: 6/7/2006

extracto
Un estudio profundo sobre la ciencia de la biología de uno de los grandes científicos del siglo XX.
***
Suele ocurrir que algunos nombres importantes no son populares. En la historia de la biología, el de Ernst Mayr -como el de Dobzhansky- es una referencia obligada. La obra de Mayr no es mediática, su prosa serena, fría, es poco vistosa, y sus ideas reflexivas y equilibradas provocan poca confrontación. Mayr no ha sido polémico como Richard Dawkins o Edward O. Wilson, ni ha sido protagonista de nuevos modelos biológicos como Stephen Jay Gould o Lynn Margulis. Este profesor de Harvard, elegante y sobrio, ha pasado gran parte de su vida analizando el concepto de especie, e intentando acotar qué implica ese término, y estudiando otros problemas de índole biológica y filosófica. Ha sido un sabio de la biología ( "el Darwin del siglo XX", dicen en la solapa del libro que nos ocupa) y su monumental trabajo The growth of biological thought [El crecimiento del pensamiento biológico] es un libro de consulta muy útil, que incomprensiblemente permanece sin traducir en español.
Por tanto, ya advierto que estamos ante un teórico de la biología, que no escribe para el gran público, pero que se entiende sin gran esfuerzo, tal es su capacidad de concisión y de claridad. Por tanto, su ensayo Por qué es única la biología está escrito para ser leído por biólogos (debería ser de lectura obligada), pero al mismo tiempo es válido para filósofos y pensadores. Mayr es modélico en el momento de plantear sus ideas, y su ritmo de exposición, sin circunloquios ni digresiones, resulta deslumbrante. Es, si se me permite una comparación forzada, algo azorinesco en su sobriedad. Y en este libro, Mayr plantea la autonomía de la biología frente a otras ciencias, pero también recupera los temas centrales de su investigación: el concepto de especie, las ideas de Darwin, las revoluciones científicas de Kuhn (que critica con contundencia)...
Algunos de los capítulos son artículos publicados anteriormente, revisados y adaptados al tono general del libro. Quizá ésta sea la única objeción que se le puede hacer, esa leve discordancia de estilo y de profundidad que se produce entre algunos de los capítulos. Pero, en cualquier caso, el resultado es atractivo, con un par de textos finales que interesarán a cualquier lector, sobre el origen del hombre y la vida extraterrestre. En este último aspecto, Mayr se muestra muy poco optimista sobre las posibilidades de vida extraplanetaria, y más aún de que ésta pueda ser inteligente: "La vida se originó sobre la Tierra unos 3.800 millones de años atrás. El linaje homínido se desarrolló hace unos seis o siete millones de años, y la alta inteligencia, hace menos de trescientos mil. Esto demuestra cuán infinitesimal era la probabilidad de que sucediese alguna vez". Por tanto, Mayr propone que los esfuerzos que se realizan en llevar a término esa búsqueda de vida extraterrestre se redirijan en estudiar y proteger los ecosistemas de nuestro planeta.
Lean al viejo profesor. Murió hace tan sólo unos meses, cuando estaba a punto de cumplir ciento un años. Léanlo y entenderán por qué es tan grandioso Ernst Mayr. Sin duda, fue único en su especie.

título de la nota: ¿Por qué es única la biología?
autor de la nota: Marcelo J. Vernengo
medio: Revista Digital de Ciencias UB - Argentina
fecha: 3/1/2006

extracto
El autor defiende con intensidad la autonomía de la biología y critica con ardor la utilización que llama indebida de las metodologías, procedimientos y conclusiones que se realizan en el ámbito de las ciencias exactas (matemáticas) y naturales (física, química y otras).
***
En la segunda parte del libro el autor, un reconocido experto en el área de los evolución y un continuador de primera línea de Charles Darwin, describe en detalle pero sin entrar necesariamente en el uso excesivo de una jerga científica que haga ininteligible su comprensión, diversos aspectos de las teorías e hipótesis darwinianas y de sus continuadores. Tema que resulta de actualidad frente a las controversias que a menudo se presentan en el mundo anglosajón entre defensores de puntos de vistas muy opuestos que, en realidad, no deberían ocurrir porque se trata de dos áreas diferenciadas de los conocimientos y de las creencias de las personas.

obras relacionadas


Piergiorgio Odifreddi

La matemática del siglo XX

De los conjuntos a la complejidad


John Dupré

El legado de Darwin

Qué significa hoy la evolución